Control del embarazo

Clínica Mencía, servicio de control del embarazo

Servicios de obstetricia en Salamanca y servicios de obstetricia en Plasencia

En cada consulta es aconsejable plantear todas las preguntas y comunicar los temores, aunque se pueda pensar que son irracionales, o que van a parecer ridículos o irrisorios.

Durante el embarazo siempre se debe consultar inmediatamente con el médico ante:

  • Vómitos repetidos o intensos.
  • Desmayos o mareos.
  • Orina escasa o molestias al orinar.
  • Dolor abdominal.
  • Dolor de cabeza intenso o permanente.
  • Secreción acuosa vaginal.
  • Hemorragia vaginal.
  • Fiebre.
  • Erupción generalizada.

En la primera visita el ginecólogo, al que idealmente ya se habrá acudido para la consulta preconcepcional, se completa la historia clínica y realiza una exploración física completa. Esta primera visita de control se realiza normalmente entre la séptima y la 10ª semana del embarazo y sirve para:

  • Confirmar el diagnóstico de embarazo.
  • Descubrir antecedentes que pueden actuar sobre el embarazo actual.
  • Descartar precozmente la posibilidad de complicaciones (amenaza de aborto, embarazo ectópico, etc.).
  • Indicar las primeras normas higiénicas.

Aún cuando el ritmo de las visitas depende de cada caso, en general el control clínico se realizará con la siguiente frecuencia:

  • Hasta las 32 semanas: mensual.
  • De las 32 a las 38 semanas: quincenal.
  • A partir de las 38 semanas: semanal.

A través de estas visitas se podrá:

  • Efectuar una prevención correcta de las complicaciones.
  • Dictar consejos adecuados a cada mujer.
  • Controlar el estado del feto.

En el curso de cada consulta, además seguir el estado de salud de la embarazada y revisar su estado general, se efectúan los siguientes exámenes:

  • Examen obstétrico para determinar el crecimiento, posición y condiciones del feto.
  • Peso y tensión arterial.
  • Estudio de una muestra de orina para investigar la presencia de proteinuria (albúmina), glucosuria (azúcar), acetonuria (acetona) o hematuria (sangre) en orina.

En función de los resultados de todos estos exámenes, se actúa en consecuencia:

  • Informando a al embarazada del curso de su embarazo.
  • Dando las oportunas instrucciones dietéticas o higiénicas.
  • Solicitando las exploraciones que crea oportuno.
  • Recetando, si es necesario, la medicación precisa.

También según el momento de la gestación, y en función de las características de cada embarazo, se realizan una serie de pruebas complementarias que fundamentalmente son:

  • Análisis de sangre.
  • Ecografía obstétrica.
  • Ecocardiografía.
  • Pruebas de diagnóstico prenatal.